El lago y las mujeres
Un viejo tenía un lago en su
finca.
Después de mucho tiempo, decide ir a ver si estaba todo en
orden.
Cogió un cesto para aprovechar el paseo y recoger unas frutas por el
camino.
Al aproximarse al lago, escuchó voces animadas.
Vio un grupo de
mujeres bañándose, completamente desnudas.
Al verlo, todas se fueron a la
parte más honda del lago,
manteniendo solamente la cabeza fuera del
agua.
Una de las mujeres gritó:
-¡No saldremos mientras usted no se
aleje!
El viejo respondió:
-¡Yo no vengo hasta aquí para verlas nadar o
salir desnudas del lago!
Levantando el cesto, les dijo:
- Estoy aquí para
alimentar al cocodrilo....
Habitantes de Barcelona
- Oye, ¿sabes cómo se llaman los
habitantes de Barcelona?
- Pues.... no, todos no....
¿Es usted médico?
Estaban en un restaurante una madre con su
hijo.
En un descuido, el niño se mete una moneda en la boca y se
atraganta.
La madre intenta hacerle escupir la moneda golpeándole la espalda,
dándole palmadas en el cuello, sacudiéndolo, sin éxito.
El niño ya comienza a
dar muestras de asfixia y la madre, desesperada, comienza a gritar pidiendo
auxilio.
Un señor se levanta de una mesa cercana, y con pasmosa tranquilidad,
sin decir palabra alguna, le baja los pantalones a la criatura, toma sus
pequeños testículos, los aprieta con fuerza, y tira hacia abajo
violentamente.
Automáticamente, el niño -ante el dolor irresistible- escupe
la moneda, y el señor, con la misma pasmosa tranquilidad con la que se acercó,
regresa a su mesa sin decir palabra.
Al rato, la señora, ya tranquilizada, se
acerca para agradecerle que haya salvado la vida a su hijo, y le pregunta:
-
¿Usted es médico?
- No señora, SOY FUNCIONARIO DE HACIENDA experto en tocar
los cojones hasta sacar la última moneda.
Pedito silencioso
Una vieja, en la mitad de un servicio
religioso, se inclina y le dice al oído al esposo:
- Me acabo de tirar un
pedito silencioso... Qué hago?..
Y el marido le responde:
- Ahora nada,
pero cuando llegues a casa, cámbiale las pilas al sonotone.
Dos leperos de conversación
- Anoche ligué con una tía buenísima. ¡qué
piernas!, ¡qué pechos!, qué culo!
- ¿Y de cara?
- Ah, eso si,
¡carísima!.
Hola Manel, Seguimos riendo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Santi
HOLA SANTI,NO SE SI LO DIRAS MEDIO EN BROMA O MEDIO ENSERIO, PERO HAY MUCHOS A LOS QUE LES GUSTAN.
ResponderEliminarUN ABRAZO
MANEL