En la clase de Jaimito, la maestra les pide a los
niños que se porten bien aquella tarde porque el director iría a visitar la
clase.
Les pide específicamente que no digan:
- Maestra: ¿puedo ir al baño a orinar?
Sino que digan:
- Maestra:¿ puedo ir a cortar una flor?
Pues suena más bonito y eso impresionaría al director. Llega la hora, y el director entra y se sienta, los niños empiezan a llamar a la maestra... Juanito
- Maestra: ¿puedo ir a cortar una flor?
María:
- ¿Maestra: puedo ir a cortar una flor?
Pablito:
- ¿Maestra: puedo ir a cortar una flor?
Y sale Jaimito:
- Maestra, ¿me presta papel para limpiarme el florero)
Les pide específicamente que no digan:
- Maestra: ¿puedo ir al baño a orinar?
Sino que digan:
- Maestra:¿ puedo ir a cortar una flor?
Pues suena más bonito y eso impresionaría al director. Llega la hora, y el director entra y se sienta, los niños empiezan a llamar a la maestra... Juanito
- Maestra: ¿puedo ir a cortar una flor?
María:
- ¿Maestra: puedo ir a cortar una flor?
Pablito:
- ¿Maestra: puedo ir a cortar una flor?
Y sale Jaimito:
- Maestra, ¿me presta papel para limpiarme el florero)
- ¿Por qué está la escoba feliz?
- Porque ba-rriendo.
- Porque ba-rriendo.
- ¡Te he dicho quince mil trescientas dos mil millones
setecientas cincuenta y nueve mil quinientas cuarenta veces que no seas tan
exagerado!
Dos rubias se van al bosque en busca de un abeto para
Navidad.
Después de dos horas de búsqueda, una le dice a la otra:
- Bueno, ¡ya es suficiente! El próximo abeto que veamos lo cogemos, ¡tenga o no tenga bolas de Navidad!
Después de dos horas de búsqueda, una le dice a la otra:
- Bueno, ¡ya es suficiente! El próximo abeto que veamos lo cogemos, ¡tenga o no tenga bolas de Navidad!
Un tipo se va de vacaciones con su mujer. Como quiere
que ella disfrute, elige el que les recomienda la agencia. El establecimiento
parecía muy lujoso y tenía un precio razonable.
Pues bien, mientras estuvieron allí, todo fue sobre ruedas hasta que llegó el momento de pagar la cuenta...
La factura se había disparado hasta unas cifras desaforadas.El hombre se dispuso, lógicamente, a cursar la correspondiente queja, puesto que en la agencia de viajes el presupuesto que les habían facilitado era bastante más barato.
- Oiga, verá es que he estado mirando la cuenta, y aquí hay cosas que están equivocadas.
-A ver dígame...
-Mire, aquí dice: "Uso de piscina 400 euros", y ni yo ni mi mujer hemos ido un sólo día a la piscina.
- Ya, pero hay piscina, la tenía a su disposción y si no la ha usado es su problema...
- También dice: "Uso de la biblioteca: 200 euros" y ni sabía que existía una bliblioteca.
- Mire usted, existe y si no la ha usado eso es algo que a nosotros no nos importa.
- Y que me dice lo de: "Consumo bebidas en mini-bar: 630 euros". ¡No hemos probado ni gota de alcohol!
- ¿Qué quiere que le diga..., ahí lo tenía...
- Bien. La cuenta asciende a 4800 euros ¿verdad?, pues aquí le dejo 2000 y damos por zanajada la cuestión.
- ¿Cómo dice?
-Lo que ha oido.
-Pero faltan 2.800 euros -protesta el empleado del hotel.
- Sí, pero es lo que les cobro por hacerlo con mi mujer.
- ¡Pero si no la hemos tocado! Le juro que ni un empleado de este hotel ha hecho el menor intento...
- Sí, pero ahí la teníais. ¡Si no lo habéis hecho es vuestro problema!
Pues bien, mientras estuvieron allí, todo fue sobre ruedas hasta que llegó el momento de pagar la cuenta...
La factura se había disparado hasta unas cifras desaforadas.El hombre se dispuso, lógicamente, a cursar la correspondiente queja, puesto que en la agencia de viajes el presupuesto que les habían facilitado era bastante más barato.
- Oiga, verá es que he estado mirando la cuenta, y aquí hay cosas que están equivocadas.
-A ver dígame...
-Mire, aquí dice: "Uso de piscina 400 euros", y ni yo ni mi mujer hemos ido un sólo día a la piscina.
- Ya, pero hay piscina, la tenía a su disposción y si no la ha usado es su problema...
- También dice: "Uso de la biblioteca: 200 euros" y ni sabía que existía una bliblioteca.
- Mire usted, existe y si no la ha usado eso es algo que a nosotros no nos importa.
- Y que me dice lo de: "Consumo bebidas en mini-bar: 630 euros". ¡No hemos probado ni gota de alcohol!
- ¿Qué quiere que le diga..., ahí lo tenía...
- Bien. La cuenta asciende a 4800 euros ¿verdad?, pues aquí le dejo 2000 y damos por zanajada la cuestión.
- ¿Cómo dice?
-Lo que ha oido.
-Pero faltan 2.800 euros -protesta el empleado del hotel.
- Sí, pero es lo que les cobro por hacerlo con mi mujer.
- ¡Pero si no la hemos tocado! Le juro que ni un empleado de este hotel ha hecho el menor intento...
- Sí, pero ahí la teníais. ¡Si no lo habéis hecho es vuestro problema!
Hola Manel,
ResponderEliminarSigue con ello, que reír es saludable.
Un abrazo.
Santi
HOLA SANTI, NO TE PREOCUPES QUE SEGUIRÉ MIENTRAS PUEDA.
ResponderEliminarUN ABRAZO
MANEL